Chile, uno de los países más largos al sur del planeta, cuenta con una extensa zona costera de 4.300 kms a lo largo del Océano Pacífico, la cual ha sido clave en su desarrollo y vinculación con el resto del mundo. El crecimiento de puertos mayores y menores surge a fines del siglo XIX y principios del XX como vías de exportación de materias primas para proveer la industria internacional, los que al siglo XXI se han consolidado como tal o han sufrido un deterioro y abandono.
La influencia foránea – mayoría de inmigrantes europeos que asentaron sus negocios en torno a la actividad portuaria de fines del siglo XIX –, en conjunto con las condicionantes locales y una geografía heterogénea y compleja, generó una imagen e impronta que hoy constituye un importante patrimonio portuario necesario de preservar.
Los artículos que hemos escogido para esta nueva edición de PORTUS 38, dan cuenta de diferentes expresiones de preservación y reutilización portuaria de norte a sur de nuestro país, situadas en contextos geográficos tan disímiles como el caso de Antofagasta en el norte, Talcahuano y Puerto Natales en el sur, al igual que aquellas en Valparaíso y su balneario turístico adyacente, Viña del Mar. Los autores participantes también reflejan una diversidad de visiones, con académicos de las Universidades Católica del Norte, de Chile, Concepción y Magallanes, así como la mirada de gestores como en el caso del muelle Vergara en Viña del Mar.
El artículo de Claudio Ostria de la Universidad Católica del Norte, desarrolla la rehabilitación y reintegración del patrimonio industrial portuario y su entorno en el norte minero de Chile, a partir del muelle histórico construido en 1892 por la firma Melbourne & Clark, elemento relevante asociado a la era de oro del salitre y declarado monumento histórico en 1978 y que hoy se ha recuperado generando un espacio urbano para la ciudad.
Por su parte, María Paz Valenzuela de la Universidad de Chile, se focaliza en el caso de las emblemáticas Bodegas Simón Bolívar, en el borde costero de Valparaíso, las más extensas de su tipo y época, las cuales no fueron incluidas en el área protegida como patrimonio mundial el año 2003 poniendo en peligro su existencia. Afortunadamente hoy día han sido incluidas en un nuevo proyecto que busca recuperar la relación de sus habitantes con el borde mar.
Continuando en la Bahía de Valparaíso, el Diputado Andrés Celis, desde Viña del Mar, expone el caso de la icónica recuperación del muelle Vergara, estructura marítima construida para apoyar la creciente actividad industrial de la ciudad a fines del siglo XIX. Integrado hoy a la trama urbana como valioso espacio público patrimonial costero, el proceso de transformación y restauración de esta obra es un testimonio vigente de la historia de este balneario.
Siguiendo hacia el sur, Mabel Alarcón de la Universidad de Concepción, presenta el caso de las edificaciones portuarias en el centro histórico asociado al puerto de Talcahuano – principal zona metropolitana al sur de Chile -, como patrimonio urbano y oportunidad para la regeneración del tejido degradado de la ciudad. Considerando las oportunidades de desarrollo generadas a partir del gran terremoto y tsunami de 2010, se describen acciones para la recuperación del Molino Brañas, uno de los paradigmas de esta transformación.
Finalmente, Fabián Barros de la Universidad de Magallanes, nos presenta la postura del arquitecto Pedro Kovacic en el proyecto de recuperación del ex Frigorífico Bories, construido con ladrillos ingleses, declarado Monumento Nacional en 1996, hoy Hotel Singular en Puerto Natales, magnífica expresión de la explotación ganadera ovina en la región patagónica austral de Magallanes.
Los casos presentados representan la muestra de un valioso y variado legado patrimonial portuario existente a lo largo de la extensa costa chilena, siendo a su vez, un registro histórico de los procesos de transformación que han vivido las ciudades costeras en el país.
El anterior Report N. 26 de PORTUS dedicado a las ciudades puerto de Chile, presentó una variedad de casos bajo el enunciado “Chile, un mar de lugares al fin del mundo”, lo cual se reafirma en este nuevo número, dado que el desarrollo de nuestro país no puede sino ser entendido junto y a través de su largo litoral. Aunque históricamente, los principales poblados de Chile se ubicaron al interior, desde mediados del siglo XIX, se desarrollaron y consolidaron aquellos junto al mar, estableciendo una relación dependiente con las oportunidades y restricciones que este recurso y su paisaje natural nos ha definido. Todo ello implica entender que este patrimonio portuario ha estado siempre muy ligado a los hitos de cada momento histórico que el país ha vivido.
Por este motivo, en este Report N. 38 hemos querido abordar esta amplitud de situaciones entregando una selección de casos que exponen interesantes intervenciones de recualificación del patrimonio portuario de norte a sur, con sus distintas características geográficas y socioeconómicas, siendo fiel reflejo de la condición que caracteriza a Chile, un mar de ciudades al sur del mundo.
Head Image: Valparaiso, 1870. (Fuente: Biblioteca Nacional, Chile)