“Un caballo pintado a rayas no es una cebra”
La frase es atribuida a Louis Kahn, uno de los grandes arquitectos del siglo pasado estando sus obras caracterizadas por una construcción reflexiva de los espacios.
Joan Alemany en su libro conmemorativo “El Port Vell de Barcelona”, recoge desde un planteamiento brillante y académico, el desarrollo y transformación del área del puerto de Barcelona denominado Port Vell, el lugar que tiene una mayor relación física, funcional y simbólica con la ciudad metropolitana.
El autor supera el mero análisis de lo que probablemente sea la más importante actuación urbanística portuaria llevada a cabo en el sur de Europa y conocida internacionalmente para mostrar, no ya tanto un ejemplo más de intervención en un espacio portuario ya sin un uso portuario y próximo a la ciudad, sino su modelo, un paradigma de gestión planificada de la reconversión de esos espacios portuarios en espacios de relación puerto ciudad y llevados a cabo por la Gerencia Urbanística Port 2000 creada a tal efecto en 1988 y como una entidad adscrita a la organización portuaria de Barcelona.
Esta transformación de las zonas del interior del puerto que se encuentran en contacto con los barrios del casco antiguo y la Barceloneta, se ha sustentado en su Plan Especial, como figura de planeamiento urbanística y que ha posibilitado el desarrollo de sus contenidos programáticos en acciones y realidades tangibles. Todas estas estrategias de desarrollo quedan recogidas en la publicación a cargo del que fuera secretario de Port 2000 desde su génesis, Pere Caralps Riera, y que hace que la presente edición llevada a cabo desde el Puerto de Barcelona, edición de una gran calidad, tenga un carácter de conjunto que servirá de referente dentro de la disciplina de las actuaciones puerto ciudad.
Un modelo de gestión que lo es tanto de los nuevos espacios de relación puerto ciudad como de las nuevas actividades establecidas en estos treinta años de actividad y todo ello dentro de la complejidad que suponen las transformaciones urbanas de un espacio portuario con una gran diversidad de funciones y próximas a la ciudad.
Es de gran interés la parte final del libro por lo que de propuesta de desarrollos futuros apunta, no solo en base a los nuevos espacios para usos comerciales, deportivos y de ocio, sino como espacios de producción, relación, innovación y fundamentalmente como espacios de convivencia pública que vendrán a garantizar la cohesión social. Se trata en definitiva de una gran diversidad de usos y actividades que tendrán en el futuro un desarrollo desde ese modelo reflexivo de gestión ya establecido y no casual, y que ha entendido que solamente estos espacios si son cohesionados y complejos podrán llegar a ser dinámicos e integradores.
La palabra al autor
Manuel Matoses – ¿Pueden llegar a tener los espacios de relación puerto-ciudad una vez recuperados, el mismo carácter que los espacios ciudadanos?¿Qué sería necesario para ello?
Joan Alemany – Pueden y deben tener el mismo carácter general que los espacios ciudadanos en el sentido de ser espacios públicos con sus equipamientos y servicios accesibles para todas las personas y perfectamente integrados en la vida urbana. Pero también tienen características específicas que deben destacarse para mantener su originalidad (también en sentido de origen) y una cierta identidad. En este sentido hay que considerar siempre que son espacios históricos creados por los puertos para determinadas funciones. Son áreas mixtas de relación terrestre-marítima. Pienso que en general es bueno mantener alguna actividad marítima, aunque solo sea mantener embarcaciones históricas, del propio puerto, o pequeños equipamientos para barcos deportivos de vela ligera o remo. También creo que es interesante dedicar algunos paneles informativos para explicar con textos y fotografías el origen y la actividad portuaria de estos espacios.
El libro “El Port Vell de Barcelona” describe el origen, la evolución, los problemas actuales y los proyectos de futuro de esta importante área del puerto, inicialmente de 56 hectáreas a las que se sumarán pronto las 16 hectáreas de los espacios de la Nueva Bocana. Su objetivo principal es precisamente aportar toda la información (mucha de ella poco conocida y menos divulgada) para que los lectores, especialmente los profesionales y estudiosos de estos temas, puedan conocer y valorar una experiencia pionera e innovadora, que no es solo un proyecto, si no también una gobernanza, una compleja gestión, una forma especial de financiación y un ejemplo de colaboración público-privada. Espero sea una contribución para otras experiencias españolas y de otros países a esta cuestión que plantea la pregunta: qué características generales de espacio público ciudadano y que características especiales que mantengan la memoria de la vieja instalación portuaria han de tener estas siempre importantes y complejas recuperaciones urbanísticas.
Índice de contenidos
1. La primera construcción del espacio físico del puerto de Barcelona
2. El proyecto que configuró el Port Vell
3. Las construcciones históricas del área del Port Vell. Edificios desaparecidos, edificios patrimoniales conservados
4. Antecedentes de la reforma
5. Plan Especial del Port Vell, 1989
6. Desarrollo del Plan Especial
7. Evolución en las últimas tres décadas
8. Nuevos desafíos y proyectos actuales. Renovación e incorporación del espacio de la Nueva Bocana Bibliografía del autor
Joan Alemany Llovera
Doctor en Ciencias Económicas. Profesor de la Universidad de Barcelona. Especialista e investigador en Planificación Urbana y Economía Portuaria ha realizado estudios de planificación portuaria para numerosos puertos de América Latina y España. Ha publicado numerosos libros y artículos sobre organización, planificación y trasformación de puertos. Entre los socios fundadores de RETE, ha sido director de PORTUS durante 20 años y sigue formando parte de la vida científica de la asociación. Fue Asesor y guionista del Pabellón de la Navegación de la Expo-92 de Sevilla, Comisario de la Exposición “Mediterraneum. El esplendor del Mediterráneo medieval” del Programa del Forum de las Culturas 2004, y Co-director Científico de la Plaza Temática “Ciudades de Agua” de la Expo 2008 de Zaragoza.