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La 37ª Copa América en Barcelona. Port Vell se vuelve aún más atractivo para la ciudadanía
Entrevista con Jordi VALLS RIERA, Teniente de Alcalde de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo del Ayuntamiento de Barcelona
Quiero agradecer muy especialmente a D. Jordi Valls, Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Barcelona liderando el área de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo, su disponibilidad y amabilidad para celebrar esta entrevista para PORTUS, sobre la 37ª edición de la Copa del América, celebrada recientemente en Barcelona.
El Sr Valls es Licenciado en Derecho, y tiene una amplia trayectoria profesional tanto en la esfera política como en la empresa privada, en las cuales ha desempeñado cargos de la máxima responsabilidad: ha sido alcalde Manresa, Consejero de Trabajo de la Generalitat de Catalunya, Presidente de la Autoridad Portuaria de Barcelona, Director General de la compañía Suez y Director General de Mercabarna, como hitos más significativos de su envidiable carrera profesional, entre otros.
Su condición de teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y de haber sido Presidente de la Autoridad Portuaria (2007-2011), le otorgan un conocimiento privilegiado de la realidad actual de la ciudad y del puerto. Es por tanto, una persona especialmente cualificada para valorar el desarrollo y el impacto de la Copa del América en esta ciudad portuaria.
Por todo ello quiero, antes que nada, felicitarle, tanto a él personalmente como institucionalmente al Ayuntamiento de Barcelona, por su contribución al éxito de la competición.
Es para mí un gran honor y un enorme placer poder conversar con él, con motivo de la presente edición de PORTUS.
ENTREVISTADOR | José Luis ESTRADA, Director de PORTUS Magazine
ENTREVISTADO | Teniente de Alcalde de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo del Ayuntamiento de Barcelona
¿Cómo valora el resultado de la realización en Barcelona de la 37ª edición de la Copa del América, desde el punto de vista de la ciudad? ¿Qué ha representado este evento para Barcelona?
En primer lugar, quiero dejar claro que la celebración de la Copa América en Barcelona ha sido todo un éxito. El anuncio de la sede llegó en un momento en el que Barcelona necesitaba volver a creer en sí misma y potenciar su imagen internacional, ya que estábamos viviendo de lleno las consecuencias de la COVID. Y, personalmente, creo que ha cumplido con creces con ese cometido.
¿Cuáles considera que han sido sus principales logros?
Se han logrado los objetivos que nos marcamos como es proyectar internacionalmente la ciudad para la atracción de inversiones de valor añadido, la reconexión de la ciudad con el mar, la reforma del litoral, la democratización o popularización de los deportes de vela y lo que nosotros llamamos la Revolución Azul, que no deja de ser el impulso decisivo que hemos dado a la economía azul. También es importante señalar el efecto acelerador que ha tenido sobre proyectos de inversión que ya estaban previstos. Transformaciones como la impulsada por el Ayuntamiento en el Puerto Olímpico o la apertura de múltiples espacios del Puerto de Barcelona a uso ciudadano se han llevado a cabo simultáneamente y en mucho menos tiempo del previsto inicialmente, cosa que ha supuesto una masa crítica y un salto de escala. Las aspiraciones de Barcelona respecto a la celebración de la Copa América se han cubierto por completo.
¿Cuál ha sido el papel del Ayuntamiento en la realización del evento, más allá de su función institucional como ciudad anfitriona?
La Copa América no volverá a ser la misma después de su paso por Barcelona porque se han introducido en ella elementos que difícilmente se podrán obviar en futuras ediciones. La edición de Barcelona ha sido pionera en múltiples ámbitos. Ha sido la primera celebrada en aguas urbanas, ha contado por primera vez con una regata femenina además de recuperar la regata juvenil, y ha puesto el acento en el compromiso medioambiental de la competición con acciones como el “proyecto hidrógeno”, que ha permitido que la embarcaciones de apoyo fueran totalmente descarbonizadas.
Pero, además, hemos sido la primera ciudad en contar con una “Regata Cultural”, que ha sido un programa de actividades vinculadas con el acontecimiento para la ciudadanía y que ha incorporado una ceremonia inaugural en la playa –evento de gran formato- que contó con 60.000 espectadores presenciales además de emitirse por televisión internacionalmente, y con un concierto de clausura que reunió a más de 8.000 personas en el emblemático Passeig de Gràcia. También hemos puesto en valor nuestro programa de difusión y práctica escolar de la vela y ha sido la edición que más voluntariado ha sido capaz de movilizar.
Por tanto, podemos afirmar que el hecho que Barcelona haya acogido la competición nos ha beneficiado a todos, a la ciudad y al propio evento deportivo.
Es claro que el Port Vell sirvió de base de apoyo a los equipos participantes y a la logística del evento, sin embargo, algunas actividades tuvieron como base el Port Olímpic, que depende del Ayuntamiento ¿Cuál fueron estas actividades? ¿En qué medida el Port Olímpic mejoró/complementó la oferta de infraestructura, instalaciones y servicios del Port Vell?
El Port Olímpic acogió la base de los equipos de las regatas femeninas y juveniles y gracias a la transformación ya citada también cuenta con uno de los mejores espacios para que la ciudadanía pudiera seguir la competición, el Dic de Recer. El Port Olímpic se convirtió, por tanto, en el complemento perfecto al Port Vell y el que nos ha permitido hacer nuestra aportación al enriquecimiento y transversalidad de la Copa América con la inclusión de las regatas femenina y de jóvenes.
Desde el primer momento de la organización del evento se habló de la excelente coordinación y sintonía entre Ayuntamiento y Autoridad Portuaria, juntamente con la Generalitat de Catalunya y otras administraciones y entidades ¿En qué medida eran necesarias estas buenas relaciones y como han contribuido al éxito?
Cuando se trata de un acontecimiento de la importancia y complejidad de la Copa América, y teniendo en cuenta que más allá de la repercusión deportiva queríamos que tuviera una vocación ciudadana, era esencial que hubiera una relación fluida entre todos los agentes implicados. Ciertamente, una de las claves del éxito de la 37ª edición de la Copa América de Vela ha sido la buena relación e interlocución entre todos. Un claro ejemplo de éxito de la colaboración entre administraciones y de la público-privada.
¿Cuáles han sido las principales actuaciones en materia inversora y de organización llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Barcelona, para hacer posible el evento?
A diferencia de otros grandes eventos deportivos, acoger en Barcelona la 37ª edición de la Copa América no ha supuesto la creación de nuevas infraestructuras urbanas o portuarias. Barcelona, como sede, ya reunía todas las condiciones. No ha habido un especial esfuerzo inversor sino una aceleración de proyectos ya previstos o en marcha para hacer posible que estuvieran a punto para el verano de 2024.
En relación a aspectos organizativos, es evidente que hacer compatible un evento de estas características con el normal funcionamiento de la ciudad ha supuesto un gran reto que los equipos municipales y del Puerto de Barcelona han abordado con gran profesionalidad y solvencia haciendo posible un funcionamiento fluido sin incidencias remarcables.
El Ayuntamiento de Barcelona ha compatibilizado los intereses de ciudadanía y de la organización para la celebración de la competición. Hay que tener en cuenta que la Copa América se ha celebrado en aguas urbanas, que las bases de los equipos estaban situadas en el Port Vell y en el Port Olímpic, dos espacios de uso ciudadano y plenamente conectados con la ciudad. Así que se tenían hacer compatibles las necesidades de unos y otros, garantizando la convivencia.
¿Cuál considera que es el legado que deja la Copa del América en Barcelona?
Para mí uno de los hitos principales ha sido el descubrimiento que los barceloneses han hecho del mar. Durante los Juegos Olímpicos nos abrimos al litoral y lo incorporamos como una parte esencial de la ciudad. La celebración de la Copa América ha supuesto un salto cualitativo en la incorporación del mar a la agenda de la ciudad en todos los ámbitos.
Una ciudad como Barcelona tiene toda la lógica que potencie aspectos como la economía azul o los deportes náuticos. El mar es una riqueza que tenemos y con la que no cuentan muchas de las principales ciudades del mundo, y tenemos que sacarle partido. ¿Tiene sentido que los niños y niñas de esta ciudad hagan una semana blanca para irse a esquiar pero que no tengan opción a una cosa similar en la práctica de la vela? Creemos que se deben integrar los deportes de vela como parte del currículum escolar y eso es lo que estamos haciendo, y vamos a potenciar aún más tras la celebración de la competición, con las escuelas públicas de Barcelona.
Además, nos ha dejado un legado tangible para la ciudad de primer orden: la transformación del Port Olímpic hoy ya es una realidad y estoy seguro que se convertirá en un espacio de uso ciudadano de los más destacados de la ciudad; el impulso de programas deportivos como el Viu La Vela; la transformación del litoral; y de grandes proyectos como tres nuevos equipamientos centrados en la economía azul como son el Parc de Tecnologia Marítima, el BluetechPort del Port de Barcelona y el centro Barcelona Mar de Ciència.
¿En qué medida la realización de la Copa del América ha contribuido a la mejora de las relaciones puerto-ciudad?
Tener el Port Vell tan conectado con la trama urbana de la ciudad es una riqueza enorme y para la celebración de la Copa América representó un añadido a las muchas virtudes que la organización vio en Barcelona.
El Puerto y el Ayuntamiento de Barcelona hemos compartido un rol común: ambos éramos las administraciones competentes para gestionar la sede del evento y esto no podía hacerse de otra manera que integrando equipos y dinámicas. Las relaciones entre el puerto y la ciudad siempre han sido cordiales y de colaboración, podemos tener puntos de fricción que requieren ser gestionados pero, ante el reto que ha supuesto la Copa América, la respuesta no ha tenido fugas. Hemos trabajado como un solo equipo. La celebración de la competición nos ha demostrado que cuando vamos todos a una, Barcelona es una ciudad imparable.
De no haber existido unas instalaciones como las del Port Vell ¿cree que hubiera sido posible la realización de la Copa del América en Barcelona?¿Como valora el papel del Port Vell?
Pues no sé si se podría haber celebrado, lo que tengo claro es que no hubiera tenido la misma repercusión. El Port Vell está dentro de la ciudad, es un espacio de uso habitual de la ciudadanía y contar con un acontecimiento como la Copa América lo ha hecho aún más atractivo. Por otra parte, creo que para la organización y los participantes, también ha sido muy interesante tener la competición a tan corta distancia de uno de los epicentros de la ciudad, las Ramblas de Barcelona.
Barcelona, 9 octubre 2024
IMAGEN INICIAL | Participación de turistas y comunidad local en eventos de la America’s Cup. (Fuente: Oficina de Coordinación de la America’s Cup, Puerto de Barcelona).